El brazalete del capitán

 

Para comenzar, vamos a identificar la diferencia entre brazalete y pulsera, ya que se suelen confundir.
Si te fijas en las dos palabras, brazalete viene de la palabra brazo, quiere decir que se usa entre los codos, y los hombros. La palabra pulsera viene de pulso, o sea se usan en las muñecas.

Los brazaletes se utilizan a veces para indicar afiliaciones políticas o para identificar al portador con una ideología o un movimiento social.

Pero en el futbol, significa personalidad, voz de mando, capacidad de comunicación, habilidad estratégica, responsabilidad y equilibrio emocional que son cualidades prácticamente indispensables para ser capitán de un equipo de fútbol. Generalmente estas cualidades las da la veteranía y la experiencia. Pero también el carisma.

Para el equipo es un referente. El capitán es el que da la arenga antes de comenzar el juego y en el entretiempo.
Para los aficionados es un símbolo.
Para el jugador es una responsabilidad, como ya dijimos, pero también un orgullo. Pensemos que el brazalete aprieta. Se siente constantemente en su brazo. No lo puede obviar. También lo destaca.

Si vamos a su origen, hay fotografías que muestran al capitán del Dynamo Kyiv, Andrei Zazroyev, vistiendo uno ya en 1954 y hay uno en el brazo del capitán de Italia Bruno Bolchi mientras le da la mano a Bobby Charlton en la final de la Copa del Mundo sub-18 de 1958.
En Italia revelan que una regla al comienzo de la temporada 1949-50 de la Serie A estipulaba que los capitanes deben usar brazaletes.

¿En qué brazo debe estar el brazalete de capitán?

El brazalete del capitán generalmente está en el brazo izquierdo. Los brazaletes negros, de luto, en cambio, normalmente se usan en el brazo derecho de los jugadores.

Pero también los brazaletes son comunicadores de otros mensajes.

En febrero del 2024, todos los equipos de la Liga Española lucieron -jugadores y entrenadores- un brazalete verde en la manga derecha. Con el lema “Todos contra el cáncer”. Un mensaje promovido por la Federación Española de Fútbol en colaboración con la Asociación Española contra el Cáncer.
Con esta acción se pretendió concienciar sobre esta enfermedad y lograr con la investigación, la prevención y el tratamiento, una supervivencia del 70 por ciento en el año 2030.

Un caso particular fue el uso del brazalete LGTBQ. Las selecciones de Inglaterra, Gales, Bélgica, Dinamarca, Alemania, Países Bajos y Suiza, en un principio comprometidas a lucir en el Mundial de Qatar el brazalete de apoyo a la comunidad, finalmente no lucieron el lema "One love" en la manga de sus capitanes ante el temor de una posible sanción de la FIFA.

La iniciativa de lucir este brazalete en el campo nació de la mano de la Federación Neerlandesa de Fútbol, quien portó por primera vez el símbolo en 2020. Desde entonces, jugadores de otras selecciones de Europa también han lucido el brazalete en partidos internacionales.

En Qatar las relaciones entre personas del mismo sexo y su promoción están penalizadas, lo cual unido al mal récord en materia de derechos de las mujeres y de los trabajadores migrantes, ha provocado duras críticas a la elección del país como anfitrión de este torneo.

"Ser gay es 'haram'; es decir, algo prohibido, y un daño mental.
¿Tolerancia? No.
“En Qatar no todos los aficionados son bienvenidos", declaró el embajador del mundial, Khalid Salman.

La selección de Alemania posó para la foto previa antes del inicio del partido ante Japón en el Mundial Qatar 2022 y los titulares se taparon la boca en sinónimo de protesta ante la amenaza que lanzó FIFA contra las selecciones de Europa que tenían previsto utilizar la cinta con el mensaje ‘One Love’.

En cambio, en la Copa América 2024 los capitanes de los equipos lucen un brazalete con una leyenda que tiene como objetivo promover la educación y el desarrollo individual mediante la práctica deportiva.
Los 16 capitanes de las selecciones que participan lucen una banda de color azul, con un slogan y un mensaje muy poderoso: “Elige Incluir”.

Como vemos el brazalete de capitán tiene mucho más atributos de los que pensamos.

Se ha convertido en algo más que un distintivo.

Hoy también es un canal.

Pero jamás dejará de ser esa cinta preciada en el brazo de cualquier jugador.

Por suerte el deporte siempre nos acompaña.

Sin él, no seríamos estos bichos sociales que aún nos permiten ser.

Alberto Oneto