¡CUIDADO!

Desde que ocurrió la pandemia, uno de los valores que más se ha divulgado y tratado de inculcar es el de cuidarse, que nos cuidemos.

En su momento se apeló a la cuarentena, el uso de tapabocas, la distancia social, el aseo casi exagerado y un sinfín de medidas. Y también, con el tiempo, fueron apareciendo reacciones contra todas esas medidas. Algunas moderadas, íntimas, algo rebeldes. Otras más virulentas, reaccionarias.

Haciendo un análisis del concepto cuidar/cuidarse, llegué a la conclusión de que no es tan fácil la cosa.

Cuidar y cuidarse son valores culturales que llevan mucho tiempo construir. No nacen de un día para el otro. Es una construcción y, a la vez un acto reflejo. En algunos casos innatos y en otros adquiridos. De todos modos, no es algo que podamos modificar espontáneamente y que creamos que podemos manejar a nuestro antojo.

Requiere de mucho tiempo para que podamos incorporar en nuestras cabezas las nuevas reglas, los nuevos estímulos, y así poder aceptarlos y manejarlos. De ahí que es comprensible que podamos encontrarnos con personas que desafían el cuidado. Que lo niegan. Que lo desestiman.

Para completar este análisis, quiero recurrir a dos miradas sobre este tema, desde ángulos diferentes.

Uno social:

…..Si bien no toda desigualdad implica discriminación, en tanto la garantía de igualdad no debe implicar el trato igualitario a quienes se encuentran en distintas circunstancias, de allí resulta que las desigualdades en el mundo de las relaciones de cuidado suelen verse en muchos casos como una discriminación encubierta o simplemente no verse y asumirse como parte del nuevo escenario. Si bien una cuidadora y un receptor del cuidado no se encuentran en igualdad de condiciones, quienes deben ocuparse del cuidado ejercen estructuras asimétricas de unos sobre otros. Y así se sigue reproduciendo en forma interminable esta suerte de “cadena de la desigualdad” …...
Laura C. Pautassi

Otro cultural

…..Desde la óptica de la cultura mirar el cuidado humano, implica comprender que es inseparable y propio del hombre mismo. Todos los seres humanos se han cuidado desde su origen y desde que están inmersos en la cultura. Sin cuidado, en palabras de Leonardo Boff, los seres humanos no podrían serlo. No podría concebirse la vida misma si no existiera el cuidado. Sin él, la persona pierde su estructura, pierde sentido y muere. Este hecho marca la existencia humana y muestra el verdadero origen del cuidar, que por estar influido por la cultura, es diverso, plural y universal.

Cuidar de la vida es quizás la acción mínima fundamental de un conglomerado humano. Es algo que no sólo se relaciona con la reacción instintiva de protegerse en forma individual o de grupo ante un agente externo que amenace a la persona o al conjunto, sino que se trata de una acción consciente, concertada y premeditada, con hondas bases filosóficas....
Marta Lucía Vázquez

Alberto Oneto


Comentarios

  1. El cuidarse es realmente complejo y hasta aveces incomprensible, un ejemplo es el uso del cinturón de seguridad en los automóviles... conozco a gente ( hasta me atrevería a decir "culta" ), que se lo abrochar ante la cercanía de un control policial , porque minimizan el peligro, porque piensan que es par los giles, porque... Porqué ??? Un abrazo para Alberto Oneto, me gustan sus notas , lo quiero y lo respeto mucho . 🤗 guille

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